lunes, 4 de septiembre de 2017

CIEN DÍAS Y UN COMENTARIO - Por: Diego Moncayo Amores ( *)

¿Cien días? ¿Se puede medir la eficacia, eficiencia y cumplimiento de una autoridad en los cien primeros días de su gestión?

Revisando el artículo ¿Por qué son importantes los 100 primeros días de gobierno? Encontramos que este criterio se originó en la presidencia del norteamericano Franklin D. Roosevelt, quien acuñó el término y lo usó con fines comunicativos. Como en muchos otros ámbitos, somos herederos de los usos de la política estadounidense. Roosevelt sentó precedente e inauguró una nueva manera de medir los tiempos en lo político. Aunque no todas las nuevas autoridades eligen esa vía, algunos prefieren dejar los logros para más adelante.

“Los cien primeros días son importantes porque muestran si un líder está capacitado para gestionar una transición. O lo que es lo mismo, para calibrar si los electores tomaron la decisión correcta al apostar por un candidato. Por ello, es importante demostrar que se tiene capacidad para ello”, se afirma en el articulo

En esta labor de gestión, la primera fase es la propia formación del equipo de colaboradores. La elección de los colaboradores, directores, jefes, coordinadores o como decidan llamarlos, es ya un mensaje político. Aunque la opinión pública valore o no los nombramientos, sus antecedentes ya son un indicador, “Dime con quién andas y te diré quién eres”.

En la segunda fase, está la propuesta, el plan de acción, de trabajo, etc. En general las autoridades recién electas centran su actividad en el problema que les ha hecho ganar las elecciones, en la mayor parte de los casos cercanos, falta de servicios básicos eficientes, obras inconclusas, promesas incumplidas, reclamos de participación ciudadana. ¿Recuerdan qué nos ofrecieron nuestros actuales mandatarios y cuáles sus primeras acciones para cumplir esas ofertas?

Las autoridades serán recordadas por lo que hagan durante el inicio de sus mandatos, si cumplen o no con sus propuestas electorales, si han logrado mejorar la situación de las jurisdicciones a su cargo, serán recordados como funcionarios eficientes y confiables. Si caen en errores o se perciben como incumplidos, los ciudadanos desconfiarán de su administración.

Dice el analista Albert Medrán, que “las percepciones se fijan en la mente del elector y por ello es importante comprender el valor de los primeros cien días de gobierno para poder aprovecharlos.

¿Con qué criterios medimos entonces los primeros cien días y el resto de la administración de nuestras autoridades?
¡Qué tenemos para decirles, por ejemplo a nuestros asambleístas, y al propio Presidente Lenin Moreno, después de estos primeros 100 días?
¿Usted qué opina?

*Periodista, Editor del Diario de Riobamba, Director de Agencia Aquí Chimborazo